El coatí de cola anillada sudamericano, mundi o mishasho (Nasua nasua), es una especie de mamífero carnívoro de la familia de los prociónidos que habita predominantemente en las selvas sudamericanas y la parte meridional de Centroamérica.
![]() | ||
---|---|---|
![]() | ||
Estado de conservación | ||
![]() Preocupación menor (UICN 3.1)[1] | ||
Taxonomía | ||
Reino: | Animalia | |
Filo: | Chordata | |
Clase: | Mammalia | |
Orden: | Carnivora | |
Suborden: | Caniformia | |
Familia: | Procyonidae | |
Subfamilia: | Procyoninae | |
Género: | Nasua | |
Especie: | N. nasua | |
Distribución | ||
![]() | ||
Habita en selvas de América tropical y subtropical, en Colombia, Venezuela, las Guayanas, Brasil, Ecuador, Perú, Bolivia, Paraguay hasta el norte de la Argentina y del Uruguay e incluso fue introducida en el Archipiélago Juan Fernández en Chile
Es un mamífero relacionado con el mapache boreal, pero la especie se caracteriza por hocico largo con algo de cerdo y garras de oso.
Su piel es o pardo suave o negra, con vientre más claro, y anillos blanco en la cola en muchos casos. Su cabeza es delgada con una nariz alargada, orejas pequeñas, pies negros, cola larga no prensil usada para balancearse y señalar.
Los adultos miden 41-67 cm de la cabeza a la base de la cola, agregando 30-60 cm a su longitud total. A los hombros alcanzan cerca de 30 cm, y pesan entre 3-8 kg. El macho puede llegar a ser el doble de grande de la hembra, y tiene unos caninos grandes y afilados. Tiene fuertes miembros para subir y cavar, y reputado por su inteligencia.
Caminan sobre sus pies (plantígrado) y pueden descender de árboles cabeza abajo gracias a sus flexibles articulaciones. Prefieren dormir o descansar en lugares elevados y en nichos.
Viven en grupos de 10 a 20 individuos (normalmente no más de 60), pero los machos son solitarios, carnívoros e incluso caníbales con las crías de la especie. Duermen en nidos, que hacen ellos, en las copas de los árboles.
Los coatíes llevan vidas tranquilas, y siempre dejan un vigilante como las suricata. Cuando el vigilante emite un sonido como el ladrido de un perro, los coatíes huyen a los matorrales o a las copas de los árboles, aunque algunos se dan vuelta y enfrentan al agresor. Son animales curiosos, que a veces van a las zonas urbanas a robar cosas.
Su longevidad en estado salvaje es de 15 años y en cautiverio unos 17-20 años. El período de gestación del coatí es de unos 74 días y tienen de 2 a 7 crías.
Esta especie se encuentra dividida en 13 subespecies:[2]
El coatí es una mascota exótica y rara. Cuando es pequeño es tierno y amigable, pero cuando crece, si no se educa, puede ser un pequeño gran problema. Cuando llegan a la adultez pueden ser agresivos, a causa del cautiverio y por causas hormonales. Normalmente son juguetones y es mejor que para jugar les escondan la comida en distintas partes.
Debido a su potencial colonizador y constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies exóticas Invasoras, aprobado por Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, estando prohibida en España su introducción en el medio natural, posesión, transporte, tráfico y comercio.
El coatí de cola anillada fue introducido en el archipiélago Juan Fernández (Chile) para acabar con la plaga de ratones de las islas del Archipiélago, pero terminaron comiéndose las crías y polluelos de las Fardelas del lugar.
Control de autoridades |
|
---|