El caracol gigante africano (Achatina fulica) es una especie de caracol terrestre de la familia Achatinidae, en el orden Pulmonata.[1] Estos caracoles son frecuentes en jardines y cultivos, donde se alimentan de distintas plantas, llegando incluso a convertirse en plagas de importancia económica.[2][3]
Achatina fulica reposando en una hoja de Mangifera
La concha del caracol gigante africano puede llegar a alcanzar 13 cm de longitud. Tiene forma helicoidal y está conformada por 7 a 9 vueltas y con ápex (punta) agudo. La superficie de la concha de color violeta oscuro alternado con amarillo claro. La textura es lisa.
A pesar de que es una especie herbívora, puede alimentarse prácticamente de todo, incluyendo excrementos.[4][5] En cautiverio, también puede consumir alimentos de origen animal, como comida de perros y gatos, aunque es notorio que el caracol común también consume estos alimentos en las épocas de lluvia.[2]
Son ilegales en algunos países, entre ellos España (desde 2011), donde esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras,[6] así como en Estados Unidos, dado que puede convertirse en una plaga y puede cobijar nematodos, parásitos que se alojan en tejidos fibromusculares y secreciones de baba del animal, los cuales pueden causar diversas afecciones, como meningoencefalitis eosinofílica y angiostrongiliasis abdominal en humanos, transmitida por la lombriz Angiostrongylus cantonensis, que parasita los pulmones de las ratas. También es vector de la bacteria gramnegativa Aeromonas hydrophila, que causa diversos tipos de síntomas, principalmente en las personas con sistemas inmunológicos delicados, siempre en el supuesto de que su preparación para consumo no haya sido bien realizada.[7] Asimismo, el consumo de esta especie por parte de perros domésticos les ha causado la muerte.
Como otras especies, Achatina fulica es hermafrodita, y crece y se reproduce a gran velocidad, por lo que puede llegar a producir graves daños en ecosistemas y cultivos tropicales.
Se recomienda no tomarlo con las manos desnudas y menos si en ellas hay cortaduras o heridas (se debería usar guantes siempre).[8]
Ciclo de vida
Los caracoles gigantes africanos están activos entre los 9 y los 45°C, cuando se superan esas temperaturas, entran en un estado de hibernación, viven un promedio de seis años y están principalmente activos entre la tarde y las primeras horas de la mañana.[2]
Distribución geográfica
Como especie nativa
Como especia nativa, Achatina fulica es originario de África tropical: su distribución natural abarca amplias zonas tropicales y subtropicales de varios países de África Oriental, entre ellos Kenia, Tanzania y Somalia, en algunos de los cuales se denomina lambí.
Como especie no nativa
Como especie no nativa, se lo ha registrado varios países de América del Sur, como Colombia,[9] Venezuela (avistado en Ciudad Guayana, sector Puerto Ordaz en 2014[10] y en el estado Táchira en agosto de 2016, principalmente por Táriba y La Fría. También se la encuentra en Argentina,[11] Bolivia,[12], Paraguay, Brasil, Guyana, Ecuador y Trinidad y Tobago. [13] En Perú, fue reportado en la zona costera de Piura y Tumbes, además de la Selva Central como Chanchamayo y Satipo.[14]
La especie se detectó en Cuba en 2014; actualmente ha aparecido en trece provincias y solamente no ha sido reportada su presencia en Guantánamo, Pinar del Río y Cienfuegos.[15][16][17][18]
Especie invasora
Es considerada una de las plagas agrícolas más perjudiciales del mundo, debido a su alta plasticidad a las variables ambientales, dieta polífaga y, principalmente, su alto potencial reproductivo, ya que pueden llegar a poner hasta seiscientos huevos.[19][8][20]Achatina fulica ha sido incluido en la lista 100 de las especies exóticas invasoras más dañinas del mundo[21] de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. Además de los perjuicios económicos, es de interés sanitario dado que puede ser un vector de patógenos perjudiciales para la salud humana.
España
Debido a su potencial colonizador y constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies exóticas Invasoras, aprobado por Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto.[6]
Argentina
En Argentina se introdujo por transporte humano a través de Brasil por uso alimenticio. Fue detectada oficialmente en junio de 2010 en la provincia de Misiones por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria y, posteriormente, en la provincia de Corrientes, se utiliza como carnada en la pesca deportiva los ríos argentinos.
Los últimos registros del sistema nacional de información sobre especies exóticas invasoras, indican que esta especie se encuentra en Corrientes y en Puerto Iguazú, pero también se puede encontrar en la Selva Paranaense.[20]
SENASA (6 de noviembre de 2013). «Monitoreo para detectar posible presencia de Caracol Gigante Africano en Corrientes». Archivado desde el original el 12 de noviembre de 2013. Consultado el 8 de noviembre de 2013. «El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa)[...] realizó el hallazgo de ejemplares de moluscos similares a la especie Achatina fulica en un barrio de la ciudad de Corrientes, en la provincia de Corrientes.»
Lowe S., Browne M., Boudjelas S., De Poorter M. (2000). 100 de las especies exóticas invasoras más dañinas del mundo. Una selección del Global Invasive Species DatabaseArchivado el 24 de junio de 2021 en Wayback Machine.. Publicado por el Grupo Especialista de Especies Invasoras (GEEI), un grupo especialista de la Comisión de Supervivencia de Especies (CSE) de la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), 12pp. Primera edición, en inglés, sacada junto con el número 12 de la revista Aliens, diciembre de 2000. Versión traducida y actualizada: noviembre de 2004.
Другой контент может иметь иную лицензию. Перед использованием материалов сайта WikiSort.org внимательно изучите правила лицензирования конкретных элементов наполнения сайта.
2019-2025 WikiSort.org - проект по пересортировке и дополнению контента Википедии